La higiene deportiva significa mantener una serie de hábitos que te
ayudarán a obtener el máximo rendimiento con el ejercicio físico y a realiza lo
con la máxima garantía de que no vas a tener ningún problema.
Antes del ejercicio...
1. El correcto punto de partida para realizar cualquier ejercicio físico es una revisión
médica. Sirve para detectar cualquier posible anomalía de nuestro organismo.
2. No hagas coincidir la práctica de ejercicio físico con la digestión de una comida. Prevé que
pasen dos horas como mínimo entre la comida y práctica deportiva.
3. Realiza un calentamiento previo, suave y progresivo, que acondicione tu organismo.
Durante el
ejercicio...
1. Utiliza
material apropiado a la actividad que estés realizando. Debe combinar comodidad
y eficacia, además de ser transpirable.
2. Practica
ejercicio con la intensidad adecuada a tu nivel de condición física.
3. Bebe
líquido durante el esfuerzo, fundamentalmente, si se trata de un ejercicio de
larga duración.
Después del ejercicio...
1. Unos minutos de actividad física muy suave (paseo, carrera muy tranquila, unos ligeros
estiramientos) acelerarán la recuperación post esfuerzo.
2. Debes tomar una ducha después de la actividad física. Te ayudará a recuperarte mejor, además de ser fundamental para una correcta higiene corporal.
3. Una vez acabado el ejercicio, no olvides hidratarte correctamente (bebiendo pequeñas,
pero frecuentes cantidades de agua). Influirá decisivamente en tu recuperación.
No hay comentarios:
Publicar un comentario